Nuestro trabajo con el grupo de la Asociación ‘Niños con Amor’

Niños con Amor’ es una asociación pensada para ofrecer atención en recursos de día a personas con discapacidad intelectual. Surgió en 1995 y ya al año siguiente había puesto en funcionamiento un Centro de Día y un Centro Ocupacional. En la actualidad tienen capacidad para asistir hasta a 136 personas.

Nuestra relación con esta asociación se remonta al año 2015. A partir de entonces, durante cada curso acogemos en nuestras instalaciones a sus usuarios, entre quienes se cuentan personas con diversidad funcional psíquica y física y con pluridiscapacidad. En total, la asociación forma tres grupos de usuarios, que van rotando para asistir a nuestro centro, con una periodicidad de 15 días.

Con ellos realizamos actividades que les proporcionen el bienestar que necesitan. Por un lado, el ejercicio físico que planteamos para personas con diversidad funcional les permite desarrollar condiciones como el equilibrio o la lateralidad; estimulan la mejora de su salud y su situación física general. Lo hacemos desde nuestros valores: buscando siempre adaptarnos a sus necesidades concretas y sus limitaciones, para proporcionarles la asistencia más adecuada en cada caso.

Por otro lado, hemos diseñado una serie de juegos y acciones con una gran diversidad de materiales de producción propia, creados para nuestra línea de educación.

Con ellos, trabajando además con nuestros caballos, pero también pie a tierra, buscamos potenciar con estas personas todas las áreas de su desarrollo psíquico: el lenguaje, la comprensión, las emociones…

En total, este curso han sido 24 personas las que han podido asistir a nuestro centro y realizar nuestras actividades desde la Asociación ‘Niños con Amor’.

Estos usuarios participan en nuestro programa de grupos multifuncionales con diversidad funcional, por lo que se favorecen de la ayuda que la Fundación ”la Caixa” y CajaSol otorgaron a nuestra asociación como beneficiaria de la Convocatoria Territorial Andalucía 2021.

Nuestros usuarios afectados de ELA, en el Día Internacional de esta enfermedad

La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad degenerativa que afecta a las células nerviosas en el cerebro y la médula espinal, causando la pérdida del control muscular. Es una patología que actúa de manera progresiva en los pacientes: poco a poco pierden la movilidad en todo el cuerpo. Y, por desgracia, hasta el momento presente no se ha desarrollado ninguna cura. A pesar de ello, la supervivencia de los afectados puede extenderse después del diagnóstico hasta los cinco años o más si se les ofrecen los cuidados adecuados, con los recursos necesarios.

Por eso es tan importante conocer bien esta dolencia, saber cómo afecta a sus pacientes y cómo se les puede ayudar. También, por supuesto, es imprescindible concienciar sobre la necesidad de dedicar recursos a la investigación para ofrecer soluciones médicas que ayuden a aumentar su esperanza de vida. Esta es la razón de que las asociaciones de pacientes de todo el mundo escogieran el día 21 de junio como el Día Internacional de la ELA.

Con esta ocasión, esta semana queremos daros a conocer las historias de algunos de nuestros usuarios aquejados de esta enfermedad.

Ya en otras ocasiones anteriores os hemos hablado de Consolación o de Reyes, que actualmente se encuentra en cuidados paliativos en su casa y ya no puede venir a montar al centro. Poder seguir viviendo en su casa no es nada fácil para estos pacientes: depende de las posibilidades de adaptar la vivienda y recibir los cuidados necesarios, ya sea por parte de profesionales o de la propia familia. Si no se tienen estas condiciones, la solución habitual es ingresar en una residencia, un tipo de instalaciones frecuentemente dedicadas al uso geriátrico, lo que supone un golpe más al ánimo de estas personas jóvenes.

Rafael fue otro de nuestros usuarios afectados de ELA. Sin personas cercanas para atenderlo ni medios económicos para contratar cuidadores durante 24 horas al día, tal como necesitaba, residía en el hospital. Allí fue perdiendo movilidad, sufriendo un dolor cada vez más intenso que incluso le impedía descansar por las noches. Para aliviar su sufrimiento, desde el mismo hospital se le programaban salidas para acudir a nuestro centro, donde recibía sus sesiones de hipoterapia.

El hospital era también el lugar donde podía practicar su mayor afición: la pintura. Antes de pasar a cuidados paliativos, tenía una gran habilidad para pintar con la boca. Su sueño era mostrar su obra en una exposición. Y, para cumplirlo, desde la asociación nos organizamos para buscar una sala. Ocurrió en el año 2020, en plena pandemia, lo que complicó la búsqueda. Finalmente, su sueño solo pudo hacerse realidad después de su muerte.

Sus amigos quisimos despedirlo en el centro con un homenaje alegre, celebrando su vida y todo lo que nos había aportado. Así que acudimos con comida para compartir. Y compartimos también sus recuerdos, sus anécdotas… Y, por supuesto, sus cuadros, que presidieron aquel homenaje. También se le despidió con música: la artista Iliana Labrada interpretó para él su canción “Paso a pasito”, dedicada a los pacientes de la asociación. Era una canción en parte inspirada por el propio Rafa, una canción que nació de una visita de Yliana, que le permitió conocer el centro, los usuarios y los caballos.

El trabajo de nuestra asociación con el grupo de la Residencia Anide III

La Residencia Anide III es una institución que trabaja con personas con diversidad funcional superior al 75%. Están gravemente afectadas a nivel físico y psicológico, por lo que las necesidades de apoyo que requieren son muy específicas.

Sus usuarios participan de manera conjunta en nuestro programa de grupos multifuncionales con diversidad funcional. Es, por tanto, uno de los grupos que se favorece de la ayuda que la Fundación ”la Caixa” otorgó a nuestra asociación al haber resultado beneficiaria de la Convocatoria Territorial Andalucía 2021.

Esta ayuda es un valioso impulso que nos facilita continuar trabajando para la mejora de la calidad de vida de los usuarios de la Residencia Anide III. El vínculo entre la Asociación Hispalense de Terapias Ecuestres y esta institución se inició en 2013. Desde ese año, sus residentes han podido disfrutar de nuestras terapias ecuestres, a través de unas actividades diseñadas y adaptadas a las necesidades específicas de cada persona en cada momento.

Los usuarios de la Residencia Anide III

Cada mes, nuestro objetivo con los 21 usuarios que acuden a nuestras instalaciones es trabajar aspectos físicos, psicológicos y sensoriales, en contacto con nuestros caballos y facilitando la equitación terapéutica en la medida en que cada caso lo permita. Con todo ello buscamos ofrecer a estas personas jornadas de bienestar y diversión en plena naturaleza, que al mismo tiempo permitan aliviar sus patologías.

Desarrollar estas actividades supone, en muchas ocasiones, un enorme esfuerzo debido a la gran dependencia de estas personas y la gravedad de su condición. Pero entre los valores que practicamos desde la fundación de nuestra asociación está la voluntad de acoger a todos los usuarios que lo necesiten, independientemente de la dificultad que nos planteen a nivel profesional. La recompensa a este esfuerzo está en la alegría que nos muestran y el agradecimiento que nos devuelven. Todos están encantados de acudir periódicamente a nuestra asociación y participar en nuestras terapias ecuestres.

En ese sentido, desde la dirección del centro valoran nuestra labor y la calidad del trabajo realizado, al tiempo que nos transmiten estas líneas de agradecimiento:

Queremos agradecer el trabajo que realizan todos los trabajadores/as y voluntarios/as de esta asociación, y destacar que son muchos los beneficios que aportan, tanto físicos como psicológicos, a cada uno de nuestros residentes, que esperan con ilusión cada mes acudir a su sesión de hipoterapia.

Rebeca Callejo

Por muchos años más trabajando juntos para mejorar la calidad de vida de todas las personas.

La Hermandad de la Sagrada Lanzada de Sevilla contribuye con nuestro proyecto

Desde la Asociación Hispalense de Terapias Ecuestres queremos agradecer la generosidad de la Hermandad de la Sagrada Lanzada de Sevilla, que ha decidido contribuir con nuestro proyecto realizando una serie de donaciones imprescindibles para el funcionamiento de nuestras instalaciones.

Órgano de gobierno de la hermandad

Esta hermandad goza de un enorme arraigo en la ciudad de Sevilla y cuenta con una larguísima historia, con origen en la unión de hermandades previas que se remontan al siglo XV. Su pervivencia y protagonismo en nuestra sociedad no solo obedece a la tradición o a la fe de sus hermanos, sino al papel activo en la vida en comunidad de los ciudadanos que entre todos construyen a través de su proyecto de caridad.

No en vano, esta corporación ya ha colaborado previamente con nosotros a través del proyecto de caridad “Cristo de la Sagrada Lanzada”, que se organizó el año pasado con motivo del 425 aniversario de la fundación de la hermandad. Este programa de obra social permitió la instalación de los dos primeros módulos de unas aulas de fisioterapia.

Como continuación de aquella iniciativa, este año la hermandad ha donado el sistema de alimentación de agua para el aseo adaptado y la marquesina dispuesta para la sala de fisioterapia.

Con esta donación, la hermandad se implica colaborando generosamente con nuestro proyecto, para beneficio de los usuarios de nuestras terapias ecuestres.