El pasado 14 de junio recibimos la visita de siete internos del Centro Penitenciario Sevilla I, organizada por la Fundación Prolibertas, una institución de asistencia social y cooperación al desarrollo, que desde 2001 lucha contra la marginación y la exclusión social.

Esta fundación trabaja mano a mano con los funcionarios del centro penitenciario para preparar algunas de las actividades de los internos en el exterior, enfocadas a trabajar su confianza en sí mismos y desarrollar su potencial. Sin embargo, la evolución de la pandemia de Covid-19 impidió sus salidas durante los primeros meses de 2022 hasta bien entrada la primavera. Fue entonces cuando pudieron acudir a nuestras instalaciones.
Esta actividad fue posible gracias a la financiación del Fondo Social Santa Ángela de la Cruz, una convocatoria de la Hermandad de la Amargura de Sevilla, de la que fue adjudicataria en 2021 la Asociación Hispalense de Terapias Ecuestres.
Para este grupo preparamos una visita acondicionada a sus necesidades específicas, como corresponde a los valores de nuestra asociación.
Por eso, diseñamos una serie de actividades enfocadas al disfrute de la naturaleza, el aprendizaje sobre las terapias ecuestres y la experiencia del trabajo con nuestros caballos.
Para las personas que viven internas en centros penitenciarios, actividades que nos pueden resultar tan simples y cotidianas como apreciar el canto de los pájaros o el colorido de las flores y plantas cobra una especial importancia. En esta fase de la actividad, les animamos a expresar sus emociones al respecto.
A continuación, les invitamos a conocer nuestras sesiones de hipoterapia. Para ello, les propusimos que uno de ellos asumiera el rol de un paciente con diversidad funcional, mientras el resto le asistía como auxiliar de terapias ecuestres. El objetivo era darles a conocer el día a día de estos pacientes, con sus problemas, su situación de dependencia y su necesidad de desarrollar la confianza en los demás para realizar cualquier tarea cotidiana. Durante la actividad, los internos fueron rotando para asumir por turnos este rol. Con ello pretendíamos que afianzaran su confianza en sí mismos.
A continuación, se implicaron en el cuidado de los caballos. Les contamos los beneficios que nos aportan a todos estos animales y les explicamos las razones de cuidarlos en semilibertad. Por su parte, ellos aprendieron a facilitarles la alimentación y a colocarles la cabezada de cuadra para conducir a cada caballo a su sitio.
La jornada se cerró con un picnic del que todos disfrutamos, acompañándolo con una amena charla.
En agradecimiento, los internos nos regalaron una de las cajas artesanas que elaboran bajo supervisión de su profesor de carpintería. La venta de estos artículos entre sus familiares permite a los reclusos recaudar fondos, que deciden destinar solidariamente a otros compañeros sin recursos para ayudarles cubrir sus necesidades. Un gesto altruista, apoyado en el trabajo constante de los funcionarios de Sevilla I, que aplaudimos desde nuestra asociación.